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Comprender las diferencias entre las soluciones HCM, LMS y LXP

El gran auge del mercado de la tecnología de aprendizaje, inicialmente propiciado por la transformación digital, se ve ahora impulsado por las nuevas realidades de los empleados y los entornos de trabajo, la importancia de conectar a las personas y la necesidad de vincular el desarrollo de habilidades al rendimiento empresarial.

Como consecuencia, el mercado de la tecnología de aprendizaje ha aumentado su tamaño, nivel de especialización y complejidad, lo que permite a los equipos de aprendizaje y desarrollo (A+D) adoptar un enfoque más centrado en las personas.

Según un estudio llevado a cabo por RedThread Research entre distintos proveedores de soluciones LXP y LMS, en el mercado actual hay más de 250 proveedores de tecnología de aprendizaje en activo. En este contexto, han aparecido nuevos nombres para designar categorías cuyas definiciones parecen depender de quienes las hayan creado: LEP, LXP, LMS, estrategia de habilidades, nube de conocimientos, e incluso TXP. Todos estos términos no hacen más que confundir a los usuarios.

Mientras tanto, muchos proveedores están ofreciendo nuevos servicios que antes no formaban parte del entorno de aprendizaje (por ejemplo, como las mentorías, la supervisión del rendimiento o el intercambio de contenido en redes sociales). Además, sistemas HCM consolidados que antes no proporcionaban soluciones de aprendizaje han comenzado a vender «nubes y motores de habilidades», o bien mercados digitales de talento, junto con herramientas para la administración de prestaciones, nóminas y control de asistencia.

Todo esto es más que suficiente para que un profesional de TI experimentado se sienta abrumado, por no hablar de un profesional del sector de aprendizaje.


Una forma de entender esta sopa de letras es ver la amplia variedad de soluciones de tecnología de aprendizaje como si fueran medios de transporte. Aviones, trenes y automóviles se desplazan de un punto de partida a un punto de destino, pero lo hacen de forma diferente. La mejor opción para un trayecto determinado dependerá exclusivamente del medio de transporte que se use. El hecho de que un medio de transporte permita técnicamente llegar al destino no quiere decir que sea la mejor opción. Lo mismo ocurre con las soluciones HCM, LXP y LMS.

Los sistemas HCM son como los aviones

Los aviones transportan pasajeros entre las principales ciudades nacionales e internacionales. Son enormemente eficaces para transportar un número elevado de personas a larga distancia en un intervalo de tiempo relativamente corto. Tienen mucha potencia y se requiere formación especializada para pilotarlos de manera segura. Además, los aeropuertos suelen encontrarse en las afueras de las ciudades, por lo que también se requiere un coche o un tren para llegar al destino final.

HCM es la sigla de «Human Capital Management» o gestión del capital humano. Como su nombre indica, es un sistema que permite gestionar funciones administrativas básicas para el equipo de RR. HH., como las nóminas, las prestaciones o el control de asistencia y, en algunos casos, el rendimiento y la formación en materia de cumplimiento. Un sistema HCM gestiona con eficacia estos procesos mediante la oferta de servicios estándar y escalables para el personal. Al igual que un avión no está diseñado para llevar a cada uno de sus pasajeros a un destino distinto, un sistema HCM no se ha diseñado para ofrecer servicios personalizados a los trabajadores.


Si se compara con las funciones administrativas del equipo de RR. HH., la actividad de aprendizaje y desarrollo profesional  no se puede estandarizar para todos. Por tanto, para que el proceso de aprendizaje y desarrollo de habilidades sea efectivo, se requiere un vehículo más preciso. Casi el 70 % de los participantes de una reciente encuesta elaborada por Fosway cree que sus sistemas de RR. HH. no son adecuados para el personal moderno. «Con el fin de ofrecer al personal experiencias de mayor calidad, ahora se está recurriendo a la inteligencia artificial (IA), la personalización y el apoyo en la toma de decisiones para los nuevos procesos orientados a que los empleados tengan éxito. Sin embargo, las soluciones convencionales no siempre incluyen esta funcionalidad», ha declarado Fosway.

Los sistemas LMS son como los trenes

Los trenes también están diseñados para transportar grandes grupos de personas por rutas específicas y establecidas, según los horarios fijados. No obstante, los trenes precisan menos supervisión y mantenimiento que los aviones. Además, pueden conectar mejor núcleos más pequeños y transportar a personas de manera eficiente en distancias más cortas (por ejemplo, dentro de una misma ciudad). Sin embargo, al igual que los aviones requieren un personal debidamente capacitado para conducirlos. 

Los sistemas de gestión de aprendizaje (LMS) se han concebido para que los administradores del plan de aprendizaje creen y proporcionen formación oficial al personal. Esto incluye cursos de onboarding, formación interna y actividades impartidas por un instructor. Por lo general, cumplen los requisitos de los cursos presenciales impartidos por un instructor, incluidas la inscripción y la gestión del aula, además de los cursos en línea tradicionales como SCORM y xAPI, incluidas la evaluación y la generación de informes específicos sobre los cursos de aprendizaje. Aunque algunas de estas funciones puedan coincidir con las de un sistema HCM, los sistemas LMS están especialmente diseñados para responder a las necesidades de gestión del aprendizaje y ofrecen una mayor granularidad (por ejemplo, permiten gestionar procesos de certificación complejos). 

Al tratarse de una plataforma dirigida por el administrador, el sistema LMS es más eficaz para implementar iniciativas de aprendizaje mediante un enfoque de arriba abajo. Al igual que en un servicio de tren se eligen las rutas y las paradas, un sistema LMS permite a los administradores del plan de aprendizaje diseñar y seleccionar el contenido de aprendizaje disponible para el personal.

Las plataformas LXP son como los automóviles

Los automóviles están pensados para que las personas puedan satisfacer sus necesidades individuales de transporte. Con ellos, nos podemos desplazar a donde queramos, a la hora que más nos convenga y a la velocidad que elijamos. Al igual que un automóvil, una plataforma LXP está diseñada para que las personas puedan aprender donde y cuando quieran.

En lugar de facilitar el trabajo de los administradores, las plataformas de experiencia de aprendizaje (LXP) se han concebido para que el proceso de aprendizaje y desarrollo de habilidades sea más actractivo y provechoso para los usuarios finales (empleados fijos y temporales, jefes de equipo y responsables de empresas). En otras palabras, una organización gestiona el aprendizaje mediante un sistema LMS y lo facilita mediante una plataforma LXP. 

Una manera de facilitar el aprendizaje para plataforma LXP consiste en integrar recursos formales e informales en único sistema de aprendizaje que se pueda supervisar. El contenido de aprendizaje informal puede incluirse en artículos o blogs, seminarios web, libros, pódcast o vídeos digitales. Los trabajos de investigación, incluido nuestro informe Cómo aprende el personal, revelan que la mayor parte de la actividad de aprendizaje en el entorno laboral se produce como parte del flujo de trabajo. Las plataformas LXP facilitan, capturan y miden toda la actividad de aprendizaje de un empleado para conectarla con habilidades relevantes para el trabajo. También permiten recomendar contenido de aprendizaje para crear itinerarios o planes que orienten al personal para adquirir grupos de habilidades específicas que necesiten para desempeñar nuevos roles dentro de sus organizaciones.

Josh Bersin explica el impacto que ha tenido la irrupción de las soluciones LXP en el mercado de la tecnología de aprendizaje de este modo: «La plataforma LXP es la solución de aprendizaje del futuro y el volumen de las inversiones en esta plataforma crece exponencialmente».

Creación de una pila integrada de tecnología de aprendizaje

No es difícil ver que las soluciones HCM, LMS y LXP pueden integrarse entre sí para ofrecer una solución de aprendizaje completa a las empresas. Mientras que el sistema LMS ofrece un tipo de aprendizaje formal y el sistema HCM vincula el aprendizaje con la contratación y la gestión del rendimiento, la plataforma LXP conecta todos los tipos de aprendizaje, incluido el aprendizaje informal autodirigido, con las habilidades más demandadas y el desarrollo profesional. 

Según un estudio realizado por RedThread Research, los equipos de A+D pueden facilitar seis aspectos de la experiencia del alumno: la planificación, la identificación, el uso, la experimentación, la conexión y el rendimiento. Tan solo hay tres funciones administrativas esenciales: la creación y la gestión (que confluyen a medida que la gestión de contenidos se generaliza) y el análisis.

Cada una de estas actividades implica una serie de funciones propias. Aunque deben tenerse en cuenta las seis actividades ligadas a la experiencia del alumno, la funcionalidad específica dependerán de las necesidades específicas de la organización. En el informe, se indica que el objetivo no consiste en disponer de las treinta funciones de este marco, sino en utilizarlas como punto de partida para diseñar el ecosistema de aprendizaje idóneo.

Ventajas de integrar las soluciones LXP y LMS

Tu sistema LMS incluye magníficos servicios que muy pocas personas conocen. Una buena plataforma LXP soluciona este problema al agrupar en una plataforma centralizada los recursos del aprendizaje formal basado en la conformidad y los recursos de aprendizaje informal. De este modo, el contenido de tu sistema LMS aparecerá junto a contenido seleccionado de aprendizaje informal, como artículos, vídeos y otros recursos de aprendizaje seleccionado para los alumos. Dado que la solución LXP muestra el contenido creado en el sistema LMS en una plataforma pensada para el uso diario, los empleados tienen un contacto más directo con el contenido. Los clientes de Degreed han observado un aumento significativo del engagement en relación con el contenido del sistema LMS.

Integración de las soluciones LXP y LMS: mejora del control, la estrategia y el engagement

  • Control del aprendizaje. Una solución LXP ofrece al personal y los jefes de equipo un elevado nivel de agilidad, flexibilidad y adaptabilidad para crear itinerarios de aprendizaje propios que se adapten a su estilo y requisitos de aprendizaje. 
  • Estrategia integral de contenido. El personal puede consultar de forma inmediata la profundidad y amplitud de las fuentes del contenido de aprendizaje a su disposición.
  • Enfoque de aprendizaje continuo. El personal no solo desea aprender sobre aquello que les resulte útil ahora, sino también sobre aquello que le ayude a lo largo de su carrera y desarrollo profesional. La plataforma LXP puede equilibrar ambas necesidadesal permitir que los usuarios elijan un curso que cumpla objetivos a corto, medio y largo plazo. 
  • Nivel de competencia en el aprendizaje. En un entorno LMS único, es complicado determinar cuánto ha aprendido alguien y la repercusión en los nuevos niveles de competencia. En cambio, una solución LXP conecta el aprendizaje con el nivel de competencia al proporcionar una visión única del progreso de los alumnos y el efecto directo en su capacidad de mejorar las aptitudes y habilidades.

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